Por: Joan Antoni Melé | 22 de octubre de 2013

El señor feudal de la especulación

¿Es la especulación financiera positiva para la sociedad? Lo han defendido y, por mucho que pueda parecer increíble, así lo siguen haciendo muchos economistas. Pero Robert J. Shiller, uno de los tres ganadores del último Premio Nobel de Economía y defensor de la inversión responsable, no se encuentra entre ellos.

Quería compartir con los lectores la breve fábula del señor feudal que cobraba por dejar pasar por un río, un símil sobre la especulación que recoge Schiller en un artículo reciente.

Desde siempre, navegar por el río que atravesaba las tierras del señor feudal había sido libre y gratuito. Sin embargo, un día este tuvo la gran idea: instalar una cadena en el lugar y contratar a un cobrador para obligar a los barcos a pagar por pasar.

Río Monet

Se podría pensar que el señor cobraba por alguna mejora introducida en el río, algún cambio con coste pero beneficioso para la sociedad. No obstante, como escribe Shiller, este no era el caso. “No hay nada productivo respecto a la cadena”, y además “si suficientes señores feudales a lo largo del río siguieran su ejemplo, su uso podría verse afectado seriamente”.

Como en la fábula, según el Nobel, la especulación solamente genera beneficios para los que la practican y no aporta nada a la sociedad. Va más allá, con una afirmación que, por desgracia, sonará a muchos: los especuladores “buscan los mejores acuerdos comerciales, creando una ‘externalidad negativa’ para aquellos que no forman parte de la partida (…) endilgan malos activos a inversores menos conocedores”.

La crisis y los últimos Nobel

Cuando Shiller alertaba, antes de la crisis y recogiendo la idea de Keynes,  sobre cómo los  “instintos animales” tenían una influencia excesiva y peligrosa en los mercados financieros, pocos le escuchaban.

Pero nunca es demasiado tarde para entender algunas cosas. Y, sobre todo, para desterrar de una vez por todas aquello de que la economía es algo demasiado complicado para el ciudadano de a pie, ese mensaje habitual e interesado.

De otro miembro del trío premiado con el Nobel, Eugene F. Fama, destaca otra idea muy actual. Considerado un economista más ortodoxo que Shiller, Fama ha osado discutir la idea que nos ha acompañado durante tanto tiempo de que, cuanto más grande, mejor; señalaba que las grandes entidades bancarias pueden conllevar riesgos.  Añadiría que ese riesgo depende, sobre todo, de hacer las cosas con responsabilidad o no. Hacer empresa o banca con valor social, impulsando inversiones en economía real, o abocarse a prácticas especulativas que, además de ser socialmente criticables, pueden arrojar a cualquier entidad a una montaña rusa.

Inversión responsable

También me parece importante que los Nobel hayan premiado, además de a tres personas, un campo de conocimiento particular: las llamadas finanzas del comportamiento. O cómo la psicología colectiva influye en los movimientos de los mercados.

El comportamiento colectivo puede llevar a inflar burbujas sin fundamento y a hundir proyectos sólidos, por el puro afán de maximizar el beneficio individual. Sin embargo, también puede cambiar las cosas. Porque invertir no es malo y el afán de lucro, si es con honestidad y sin perjudicar a las personas y el medio, tampoco. Un ejemplo son los miles de inversores que han optado por apoyar el desarrollo de la banca ética en España y Europa y han adquirido capital social de Triodos Bank. Una fórmula de inversión rentable, sí, pero no vinculada a la especulación del señor feudal y su coto privado, sino a la producción de bienes y servicios necesarios de la economía real.

6 comentarios a “El señor feudal de la especulación”

  • Iñigo Zabala Murua dice:

    Una reflexión muy interesante y, en mi caso, necesaria recordar con relativa frecuencia. La productos especulativos son muy tentadores por su rentabilidad pero no creo que mejoren la sociedad. A la vista esta lo que estamos viviendo. El trabajo de Triodos Bank ha formado una parte importante en mi nueva visión de la economía. Animo a los clientes de esta entidad a comprar también CDAs. En mi caso, me ha ayudado también a tener un consumo mucho más responsable, tener un estilo de vida más saludable y a fortalecer valores. Tengo pendiente la lectura de su libro; llegará seguro. Ahora estoy con el último número de la revista. Espero poder acudir a la charla que ofrecerá en Madrid en noviembre. En todo caso, quiero trasmitirle que me gusta mi banco.

  • El Teleoperador dice:

    ¿Cómo se combina la “banca ética” y la “conciencia” con la censura contra las informaciones con pruebas que no te gustan?

    Blogger ha eliminado un post de Mauricio-José Schwartz por una denuncia de Triodos. El artículo iba sobre la secta antroposófica y la pedagogía Waldorf que se ocultan tras y financia Triodos. Y con pruebas. Te enlazaría el artículo original pero, claro, se lo han censurado por culpa vuestra. Lo puedes ver aquí:

    http://elteleoperador.blogspot.com.es/2013/10/este-articulo-es-de-mauricio-schwarz.html

  • Moderador dice:

    Buenas tardes: Hemos informado a Blogger de las alusiones personales y ofensas que el autor del blog Charlatanes dirige hacia esta entidad y algunos de sus empleados y dicha plataforma ha considerado adecuado eliminar dicho post. Desde que publicara un primer artículo crítico hacia el banco en agosto de 2012, el autor no cesa de hacer referencias constantes a este artículo a través de diferentes post en su blog, nuevas actualizaciones y su cuenta de Twitter, buscando sembrar dudas sobre la actividad transparente de este banco. Desconocemos los motivos que le empujan a ello. Dado que el autor del blog no permite comentarios en su blog, cerrando la posibilidad de respuesta por parte de los aludidos, nos hemos visto obligados a adoptar otras medidas, como hicimos al dar respuesta pública a través de Menéame. También hemos respondido abiertamente sobre el tema cada vez que nos han preguntado en nuestros blogs, nuestro canal de Facebook e incluso en las conferencias públicas que ofrecemos. Un saludo.

  • JOAN dice:

    Sobre este “señor feudal” los medios y sus colaboradores adscritos procuran no hablar. Ejemplo: El 11/10/13 en las cartas de los lectores, La Vanguardia acoge una pregunta (cursada en el mes de julio) sobre los flujos monetarios, enmarcada, que la responde su colaborador habitual Alfredo Pastor,sin contestar lo que se pregunta. En vista de ello,nueva carta al diario, que obviamente ni ha visto ni, casi seguro, verá la luz. Es una más de las muchas enviadas sobre este tema, y otros afines, que no les interesa.

    15/10/13
    MERCADO SECUNDARIO Y LIQUIDEZ
    Profesor Alfredo Pastor, gracias por su respuesta a mi carta del pasado viernes. Creo que no me supe expresar. No pensaba en el PIB, que ya daba por supuesto que no incluye los movimientos en Bolsa. Tampoco en los pisos y la posible recuperación de su precio: doy por sentado que les pasa lo mismo que a los títulos: no tanto que sean invendibles, como que pueden subir o bajar al venderse y tardar, ambos, más o menos en conseguirlo. Mi pregunta era, solamente, si podría ser mejor para la economía, que esos flujos financieros que mueve la Bolsa, de volumen tan considerable, se dirigieran a crear o ampliar empresas, comprar bienes de producción, crear empleo en actividades de economía realmente productiva. Y si la respuesta fuera que sí, ver de qué forma se podía hacer para ir en esa dirección. Ni más ni menos que esto. Pienso que quienes nos movemos más por intuiciones que por conocimientos macroeconómicos, pensamos que si esas masas monetarias tuvieran otros reglamentos transparentes que no facilitaran la especulación, no se quedarían ociosas y acudirían a otras oportunidades que se les ofrecieran. Y estamos convencidos de que esas iniciativas existirían, aunque cambiaran los incentivos especulativos por otros más racionales. ¡Hay tanto trabajo por hacer!. Pero, precisamente porque sabemos menos, lo hemos de preguntar con esa concreción.

  • Arman Saló dice:

    ¡Qué gracia me hace «El Teleoperador»! ¿Quizás «Teleoperador» de censuras? Ayer dejé un comentario en su blog que obviamente no ha publicado. Resulta que estos seres que ahora se hacen llamar «magufos» (con solo pronunciar el nombre me traslado a un patio de colegio donde los chavales resuelven sus “historias” a balonazos y golpes de tierna testosterona…), van por ahí reivindicando el derecho a no ser censurados cuando han faltado al respeto a todas las personas afines a la Antroposofía. Y luego ellos, los «magufos», alias «don Pataletas», no te publican el siguiente comentario que a continuación reproduzco con el permiso del señor Joan Melé; al que aprovecho PARA FELICITAR POR SU GRAN, LIMPIA Y TRANSPARENTE LABOR SOBRE UNA ECONOMÍA MÁS PODRIDA QUE UN LODO MEDIEVAL. Parece ser que todo lo limpio, lo que evoluciona favorablemente para la humanidad, les chamusca el rabo a estos aprendices de demonios… A continuación reproduzco el comentario que dejé en todos los blogs “solidarios” con el señor MauricioguiónJosé:

    “Buenos días, don Mauricio-José Schwarz:

    No merece mucho la pena aclararle ciertos conceptos que usted, sin tener un conocimiento objetivo y cabal de términos y causas, vomita sobre esta disciplina espiritual, reconocida así a nivel mundial: Información de Wikipedia, la enciclopedia libre… y que como cualquier otra, nunca se ha metido con nadie. Que a usted no le guste el Budismo, por ejemplo, o no comulgue con sus principios, no significa que tenga que cargar, como soldado resentido, contra ellos. En la enciclopedia virtual podrá ver como Rudolf Steiner, además de tener varias profesiones, era una persona con un vasto mundo de cultura y conocimientos. Creo que lo de ‘médium’ y ‘oculista’ lo destaca usted para hacer gala de su rabieta. ¿Qué le ha pasado a su EGO con la Antroposofía?, ¿dónde le han dado que ‘chilla’ usted como animal herido? Sinceramente, me gustaría saberlo. Nadie en su sano juicio lanza una granada desde su alma contra algo que nunca ha frecuentado o que no conoce desde “dentro”.

    Señor Mauricio-José, LA ANTROPOSOFÍA NO ES UNA SECTA; aunque es cierto que, ante determinados ojos o consciencias, puede resultar “sectaria” en cuanto a la forma de verter su metodología. Hay disciplinas que sin ser abiertamente sectas, sí resultan “sectarias”, en el sentido de herméticas, para otras filosofías más abiertas o reconocidas socialmente por un gran número de seguidores. Sin considerarme antropósofo, conozco la antroposofía y sus métodos muy cerca y le puedo asegurar que muchas de sus fuentes o ramas: medicina, agricultura, economía… están sembrando un bien incalculable en esta sociedad oscura, densa y tremendamente materialista que ahora transitamos.

    No voy a rebatir sobre toda la estulticia que vuelca usted en un método pedagógico que solo pretende obtener lo mejor del ser humano: personas libres, capaces de tomar las riendas de su vida en sus manos, sin necesidad de atacar a otros cuando las cosas se pongan ‘feas’ en lontananza. No tiene absolutamente nada de malo, más bien al contrario, explicarle a un niño el funcionamiento de una máquina con elementos entrañables como gnomos y duendes, ¿o acaso usted le detalla, una a una, todas la piezas a su hijo para explicárselo? Sería patético actuar así con un pequeño que aún está inmerso en un mundo de fantasía. Mi madre, sin tener ni idea de métodos antroposóficos, me contó muchas cosas de la vida a través de los cuentos, de los gnomos, las sirenas y demás duendecillos que poblaban mi imaginación. Le debo una inmensa gratitud a mi madre, pues esa forma de transmitirme ciertas cosas de la vida, me ha salvado de no caer presa de este mundo de locos que solo sabe atacar a todo aquel que difiera de su forma de pensar materialista y diabólica.

    Qué curioso, sin necesidad de ponerme en trance, detecto que con solo leer su nombre, mi memoria se remite a una “telenovela”, de esas que están tan de moda y que tienen por leitmotiv fundamental guerrear y escupir frustraciones sobre los demás a diestro y a siniestro. ¿Montessori o Waldorf, señor Mauricio-José?, ¿estás conmigo o contra mí?

    Arman Saló.

  • Tomás dice:

    Gracias Joan Melé por su trabajo por una mejor sociedad, nos pone un desafío a cada uno de nosotros.
    El que no quiere aportar a la sociedad y sacar provecho económico de ésta, como el especulador, es alguien que también “vive” en todos nosotros, (yo me lo digo mí mismo). Sería bueno darse cuenta de ello, y que todos veamos que la felicidad está en “servirle (ayudarle) al otro”.

    Respecto a los ataques que solo pueden venir de gente que no conoce sus problemas y defectos, le da miedo conocerlos, y por ello censura en su blog, «El Teleoperador», a quienes le muestran la situación en la que se encuentra (“le da miedo mirarse al espejo”). La mejor forma de luchar contra esa nula transparencia es ser más trasparente uno mismo. Eso hace Triodos, ¡que buena!, jeje.
    Saludos

    s de esperar que gente

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