Como es conocido, últimamente se ha puesto de moda hacerse fotografías a uno mismo y compartirlas en las redes sociales, lo que se ha bautizado como hacerse un selfie. Seguramente, no es más que una diversión inocente, de la que hemos visto disfrutar al propio Barack Obama, autofotografiándose con otras personas en actos oficiales.
Sin embargo, no puedo dejar de preguntarme algo. ¿No será también un síntoma claro de esta era caracterizada por un cierto egocentrismo?

Imagen: DavityDave (CC BY 2.0)
Puede que alguien confunda lo que digo con un escepticismo ante las nuevas tecnologías, algo que no siento porque soy consciente de las posibilidades de mayor implicación social que nos ofrecen estas nuevas formas de llegar a los demás. Ahora mismo las estoy utilizando, para expresarme y comunicarme contigo.
Pero, al mismo tiempo, me parece preocupante que nos convirtamos realmente en una sociedad del ego en su acepción más superficial… algo aparentemente incompatible con conseguir hacer, como individuos, cosas relevantes para la colectividad.
Si nos quedamos encantados volviendo la cámara del móvil hacia nosotros mismos, ¿no nos olvidaremos de lo que ocurre a nuestro alrededor?