Yo de mayor quiero ser…
Imagen: Club de Atletismo Peña Zoiti
Muchos de los niños y niñas que vuelven justo ahora al cole ya lo tienen clarísimo: de mayores serán bomberos, médicos, deportistas y hasta superhéroes. Ciertamente, las elecciones que hagan ahora podrán ser muy poco sensatas, pero nadie será capaz de negar que están hechas desde el corazón.
Por desgracia, o por suerte, pasará el tiempo y las certezas más resplandecientes se irán ocultando tras los nubarrones de las preguntas y las dudas. Tantas que en muchos casos lo único que serán capaces de ver y sentir estos chicos serán las mil y una presiones sociales, explícitas o no tanto, para elegir un camino profesional “que tenga muchas salidas”. Vaya, que el corazón acabará contando más bien poco en sus decisiones.
He comentado alguna vez que, personalmente, pasé bastantes años sin tener realmente claro lo que quería hacer.
Tenía una cosa más o menos segura: recuerdo cuando me dije “no voy a trabajar nunca en un banco”… y luego la vida dio sus vueltas de todas clases. Me costó décadas encontrar, ironías del destino, el sitio en el que hoy me encuentro cómodo y que es precisamente una entidad financiera. Aunque no es una cualquiera, sino un banco que quiere cambiar las finanzas y, a través de eso, mejorar la sociedad. También me tomó años darme cuenta plenamente de que solo cuando tienes esa sensación de que todo encaja, de que la frontera entre lo personal y lo profesional no es tal, puedes ser feliz.
Una educación errónea
Quizás hay un error en la misma frase “qué quieres ser de mayor”, que tanta gracia nos hace preguntarle a los niños esperando sus respuestas imaginativas. Parece como si de mayores tuviésemos que ser algo diferente, transformarnos incluso en lo que no somos, con tal de ganarnos el sustento.
Vuelvo a pensar en los que están a punto de empezar un curso nuevo y todavía les quedan muchos por delante. Creo que el mundo sería un lugar enteramente distinto si no tuviesen que renunciar durante un periodo determinado a ser quienes son. Son ellos los que tienen que decidir cómo va a ser el futuro, así que animémosles a que se tomen el tiempo que sea necesario para apasionarse por algo, para entender lo que les motiva realmente y que, con ello, puedan tener una vida mejor y también dar lo mejor de sí mismos para los demás. He contado muchas veces que agradezco profundamente a mis padres que me inculcaran la idea de “ser un hombre de provecho a la sociedad”, es decir, la idea de que hay que estudiar y prepararse para ser útil al mundo. Se trata de entender la vida como servicio, y descubrir que el servicio a los demás se convierte en un camino de crecimiento personal.
En ocasiones, nuestros hijos, sobrinos o nietos nos preguntan “¿por qué tienes que ir a trabajar?”. Y muchas veces respondemos poco más que “porque tengo que ganar dinero para comprar la ropa, la comida…” No nos damos cuenta, pero ya estamos influyendo en que ellos piensen solo en términos de dinero. ¿Y si intentásemos recordar qué aportamos al mundo y explicar que, aparte de para cubrir nuestras necesidades básicas, “voy al trabajo para ayudar a otras personas con lo que hago”?
No es fácil pero, de mayores, tengamos ya más o menos primaveras, todos deberíamos aspirar a ser nosotros mismos.
10 comentarios a “Yo de mayor quiero ser…”
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Fantástico escrito, muchas gracias!
un estudiante
Siguiendo tu linea de pensamiento que comparto plenamente habria que preguntar a los niños “Que cosas quisieras hacer cuando seas grande para ser util” (valga el juego dialectico entre el hacer y el ser y valga tambien el plural… porque limitarlos con que solo hagan una cosa)
Buenos dias Joan
te trato de tu ya que te has convertido en alguien cercano cada vez que leo algunos de tus post o veo cualquiera de los videos de youtube. desde que vi tu aparicion en buenafuente fue la motivacion que necesitaba para cerrar mi cuenta bancaria y moverme a triodos.
simplemente te escribo para sugerirte, como persona curiosa que pareces ser y si es que aun no lo conoces los videos y la vision que tiene sobre las relaciones humanas en la empresa y la educacion de Koldo Saratxaga, quien refloto a Irizar cuando estaba en quiebra. desde que conoci sus charlas me ha impresionado el punto de vista que rompe con lo comun que tiene
sin mas sugerirte esto por si podria interesarte
un saludo!!
Muchas gracias Íñigo por tus palabras y también por la sugerencia. Saludos,
Joan
Comparto completamente tus reflexiones, yo añadiría que un niño debe pensar “yo de mayor quiero ser feliz”
Gracias por ayudar a convencerme de mi percepción: las personas estamos cambiando, nos movemos hacia algo mejor, comenzamos a mirarnos a nosotros mismos y a hacer cambios desde ahí, el resto vendrá dado.
” solo cuando tienes esa sensación de que todo encaja, de que la frontera entre lo personal y lo profesional no es tal, puedes ser feliz”
Comparteixo la idea. Llàstima que no ens ho ensenyin de petits, a casa, a l’escola. Penso que potser molts dels nostres educadors no ho havien descobert.
Tinc la fortuna d’haver fet un canvi professional/ personal que em fa sentir feliç en el sentit que indiques. Espero saber-ho transmetre als meus fills.
Gràcies pel teu article, Joan.
Sacar lo mejor de una vida.
La mama contempla al bebe y se da cuenta de lo que le gusta (si es sociable, como disfruta,… )mas tarde el niño dejara la presencia y olvidará lo que es, su madre se lo recordará y el niño sera reconocido como lo que es y lo podrá desarrollar, esto es una vida plena. Recordemos las palabras de Alexander Lowen cuando le dijeron que escribiera un libro diciendo como educar aun hijo: Solo el amor de una madre puede saber lo que un niño necesita.
Durante varios años di la charla a estudiantes secundarios de porqué elegir la carrera Ingeniería Química en la Universidad Tecnológica Nacional Facultad Regional Buenos Aires, pero antes de la venta siempre les dije “no piensen en que carrera les va a dar seguridad económica en un futuro, porque no saben cuando se gradúen que cambios habrán afectado al mundo y si tal o cual carrera sera la más demandada o la mejor paga” sino que “piensen en que los puede hacer felices? porque así lo harán mejor, y si son los mejores en lo suyo, la retribución económica llegará temprano o tarde, la retribución social lo mismo, pero la retribución emocional será instantánea”. Somos nosotros mismos, haciendo lo que nos gusta y aportando nuestro granito de arena para tener un mundo mejor!
En mi caso les digo a mis hijas que mi trabajo es “ayudar a que se salven vidas” (trabajo en protección contra incendios).
Estimado Joan gracias por tu valentía ,la que me representa plenamente.que los cambios que tenemos
que hacer gran parte de este mundo ,lo sabemos y nos gustaría,pero nos hacemos los tonto.
por no tener la valentía de ir en contra de este sistema que nos tiene ahogado.
Y tener que ir contra la especulación,Dios nos de sabiduría para el cambio de actitud.y tener una mejor
Vida para la nueva humanidad.
Saludos Cordiales
Miguel Angel Tarragò C
Santiago de Chile