Por: Joan Antoni Melé | 19 de junio de 2013

El reto de la banca transparente

Como en el ciclismo, muchas veces en la vida el que va delante, aún a la misma velocidad que los que le siguen inmediatamente por detrás, debe esforzarse más que el resto. Pedalea contra el viento que le alcanza directamente en la cara, divisa el horizonte lejano y también las curvas repentinas del camino que le obligan a tomar decisiones por si mismo. Pero este esfuerzo adicional no es individualista y, como ocurre en el pelotón ciclista, facilita el avance al resto de las bicicletas; tiene valor social.

Triodos Bank: Banca transparentePienso que ser un banco con valores y totalmente transparente, que hace públicas las iniciativas y empresas a las que financia, se parece bastante a esto.

Abrimos terreno virgen, sin poder copiar a otros, por lo que necesitamos un extra de energía, de ilusión y de creatividad. Necesitamos varios puntos más de motivación; algo que, por otro lado, obtenemos justamente de la convicción de que estamos haciendo algo nuevo, algo que la sociedad necesita y que confiamos que puede inspirar a muchos más.

Compromiso, equilibrio, aprendizaje

Cuando hablo con mis compañeros de Triodos Bank, les recuerdo la suerte que tenemos de estar liderando este cambio. Especialmente, al personal de las oficinas y de atención telefónica y email, que se esfuerzan cada día por explicar con claridad qué es la banca con valores en medio de este momento de desconcierto sobre el mundo financiero en general. O también a nuestro modesto equipo de comunicación, que intenta responder a través de la página de Facebook del banco a cualquier pregunta que se les formule sobre las variadas casuísticas que pueden surgir en proyectos a los que se ha concedido financiación.

Les digo que lo que estamos haciendo no es fácil pero que vale la pena. No es un cambio cosmético, en absoluto, ni una simple campaña de marketing; no es eso, sino algo muy real por lo que tenemos la suerte de esforzarnos cada día. Es el reto de construir una alternativa paso a paso.

Además de una cuestión de compromiso, es también un empeño por encontrar el equilibrio en todo. Los compañeros del área de financiación lo saben perfectamente, cuando analizan el crédito a iniciativas y buscan que combinen valor social, medioambiental o cultural y que, no menos importante, sean viables económicamente. Nuestra primera responsabilidad como banco sostenible es salvaguardar un dinero que no es nuestro; eso también es ética.

Explicamos que Triodos Bank es una entidad con más de tres décadas de experiencia en su modelo de banca ética en Europa, iniciado en 1980. Una propuesta que, esencialmente,queremos que no sea una anécdota positiva, sino un proyecto de cambio auténtico, profundo, asentado sobre ideales que, al mismo tiempo, sea opción de cambio efectivo, práctico y enraizado en la realidad posible para una mayoría social.

La experiencia acumulada es innegable. Pero el desarrollo de la banca con valores está abriendo un nuevo escenario, y el que va delante tiene que aprender y crear cada día.  Tenemos mucho por aprender, porque estamos construyendo el cambio. E incluso me atrevería a ir más allá, con el riesgo de molestar que esto conlleva. Afortunadamente este proyecto nos permite aprender a todos, a empleados de base y de la dirección, pero también a clientes y a la sociedad en general.

Ser una entidad de banca transparente implica ayudar a las personas que confían en nosotros a comprender qué es un banco, cómo se gestiona su dinero, qué limites tenemos y también qué posibilidades existen todavía delante nuestro.

Informar y tratar a las personas como adultos, no intentar despistarlos con determinadas tácticas de venta. Gracias a las personas con sensibilidad, que no les da lo mismo lo que pase a su alrededor, que han confiado en nosotros y a nuestro equipo trabajamos para conseguir que el dinero también pueda tener un poder positivo, y para explicarlo con transparencia. Ese es nuestro reto.

3 comentarios a “El reto de la banca transparente”

Deja un comentario